El Test de Personalidad para Adolescentes puede ser una curiosidad, una necesidad y una ayuda, dependiendo del momento en el que se encuentre el adolescente y sus padres.
Desde hace 25 años, realizo Test de Personalidad para Adolescentes, a cada uno de nuestros alumnos que van a realizar un Curso Académico en el Extranjero. Ahora que estoy delante de otro test y pensando en el chico que tengo delante y en sus padres, siento la responsabilidad de mejorar todo lo que pueda cualquier situación.
Ayudar a unos padres a educar a su hijo, en la adolescencia, es una labor preciosa y gratificante. Todos los padres deseamos conocer los resultados, en el fondo es como si nos estuviesen evaluando, somos así, nos sentimos responsables de todo… Lo lógico sería que no tuviéramos esa curiosidad por conocer los resultados, ya que sabemos cómo es y cómo está nuestro hijo/a, ¿verdad?. Pero no es así, y menos en la adolescencia. Podemos hacernos una idea. Pensamos que sabemos cómo son, pero muy en el fondo tenemos nuestras dudas y un Test de Personalidad nos brinda la posibilidad de aclarar esas dudas.
El Test de Personalidad para adolescentes puede ser la confirmación de lo que pensamos que es, o puede orientarnos y clarificarnos lo que hemos de trabajar y donde podemos ayudarlo más.
¿QUÉ ASPECTOS SE PUEDEN EVALUAR EN UNO DE ESTOS TEST?
ALGUNOS ASPECTOS DE LAS ESCALAS PRIMARIAS
– Afabilidad:
– Estabilidad Emocional
– Dominancia
– Atención a las normas
– Sensibilidad
– Aprensión
– Privacidad
– Perfeccionismo
– Autosuficiencia
– Tensión
entre otros …
PREFERENCIAS OCUPACIONALES: ¿Hacia donde va dirigido su futuro laboral?
– Manual
– Científico
– Artístico
– Ayuda
– Gestión o Comercio
– Organización
DIFICULTADES COTIDIANAS (Algunas de las que evalúa)
– Desánimo
– Preocupación
– Imagen pobre de sí mismo
– Disconformidad en general
– Dificultades con la autoridad, en casa o con la adicción.
– Afrontamiento deficiente
¿PARA QUÉ SIRVE UNO DE ESTOS TEST EN LA ADOLESCENCIA?
Realizar uno de estos Test es como ir al médico a hacerse una revisión anual o un análisis de sangre, puede variar el hierro, el calcio… y estas carencias pueden llevar a otras consecuencias.
Cuando vamos al médico puede que nos sorprenda lo que nos diga, o únicamente, nos ratifique lo que nos imaginábamos o sabíamos. Pero de cualquier modo nos asegura lo que hemos de hacer y lo que no hemos de hacer.
Un test de estas características es muy parecido a un análisis de sangre. Podemos conocer como se está desarrollando la personalidad y el carácter de nuestro hijo/a, qué le pasa, cómo se siente y podremos actuar de una forma mucho más correcta y sensata en consecuencia a los resultados, cuando vemos que algo no está yendo por donde deseemos.
En la adolescencia, una etapa de turbulencias, donde los padres creemos que nuestros hijos ya no nos quieren escuchar y nuestros hijos piensan que no les entendemos, un test puede ser un gran puente para volver a retomar las riendas de forma tranquila y segura.
POR LO TANTO:
No únicamente nos hacemos análisis de sangre cuando estamos enfermos, a veces por control o rutina va bien saber como están las cosas.
Un Test, en la adolescencia es lo mismo. No hace falta llegar a encontrarse con el problema, incluso a veces hasta con el problemas, no damos importancia a saber cómo se siente ese adolescente, que, en el fondo, es lo más importante!
Un Test nos ayuda desde luego, pero es importante después una buena evaluación de los resultados y saber cómo actuar en consecuencia… igual que con un análisis de sangre.
Os dejo este estupendo video de Elsa Punset sobre el desarrollo de la Inteligencia Emocional en la adolescencia. ¡Que lo disfrutéis!!