Hay ocho grandes consejos cuando enviamos a nuestro hijo por primera vez a un campamento, no importa a qué lugar, ya sea EE.UU, España, Canadá, Francia…
Los consejos no cambian, siempre son los mismos.
1. NO CORRAS
Hoy parece que no haya un mañana, todos los padres corren para que sus hijos sean lo más precoces, los mejores, los más rápidos. Nuestro consejo profesional es no es necesario enviar a tu hijo/a al extranjero antes de los 11 años.
Antes de esta edad, dos semanas fuera pueden transcurrir muy lentas y sería demasiado pronto para que estuvieran tanto tiempo fuera del hogar por lo que sería preferible que a estas edades durmieran en casa. A partir de esta edad, sí sería un buen momento para comenzar, siendo dos o tres semanas el tiempo óptimo.
2. SE SINCERO Y PARTÍCIPALE
Hacerles partícipes de tus ideas e intenciones y ser claros con él/ella. Explicándoles dónde van, por qué creemos que ahora sería un buen momento, etc… que se sientan con seguridad de que van a un sitio que controlan.
También ha de participar en todo el proceso de preparación y gestión de papeles, fotocopias, documentos, maletas… no lo excluyas de nada, de lo que evidentemente no puede gestionar, se lo explicas. Todo el recorrido lo ha de hacer junto a ti.
3. NATURALIZA LA EXPERIENCIA
Tu hijo/a ha de ver esta experiencia/aventura como algo natural, como un plus en su educación. Algo que mucha gente hace y, por lo tanto, forma parte de la vida.
4.LAS EXPERIENCIAS DE OTRAS PERSONAS
Compartir las experiencias de otras personas que ya lo hayan hecho, ya sea hermanos, primos o incluso, nosotros mismos, le hará entender que él/ella ahora formará parte de este grupo de personas que han tenido esta experiencia. Será uno más en este grupo.
5. SERENIDAD Y CONFIANZA
Has de transmitir en todo momento la serenidad, confianza y seguridad de que todo está controlado. Si nosotros estamos tranquilos y nos sentimos seguros en lo que hacemos, él/ella se sentirá del mismo modo.
6. LAS HERRAMIENTAS
Durante el proceso de preparación es importante que habléis mucho y vayas dándole algunos buenos consejos y herramientas para que él/ella sepa cómo actuar en cada situación. Ya sea por un malestar como un dolor de barriga, un conflicto con algún otro niño, cualquier tipo de problema que le pueda surgir. Si damos a nuestro hijo herramientas y consejos para que sepa qué hacer en cualquier situación, o a quién tiene que dirigirse para pedir apoyo y ayuda, etc, nuestro hijo se irá mucho más tranquilo y confiado.
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Podríamos resumir todos estos consejos en esta idea:
- Transmitir plena seguridad y confianza, como padres, a nuestro hijo/s de que:
- Esta experiencia es algo natural y
- Va a ser muy satisfactoria para él/ellos,
- Dar las herramientas necesarias para poder vivir esta gratificante aventura.
Es aconsejable dejar espacio, no utilizar mucho el teléfono para contactar con ellos, de modo que puedan romper en cierta forma ese «cordón umbilical con nosotros para evitarles la nostalgia.
Alejandro Ferrer
CEO MCM