Siempre digo que, si comparamos el crecimiento de un niño desde su primer año de vida hasta los 5 y el de un niño de 11 años hasta los 16 años, el cambio que vemos es igual de increíble en ambas etapas del crecimiento.
Pero entre ambas existe una gran diferencia, mientras que al niño de 1 año a 5 no le exigimos, porque sabemos que su evolución natural de aprender, caminar, hablar o comer se encargará se su desarrollo, al hijo de 11 a 16 años le exigimos un rendimiento físico e intelectual.
¿Sabes cómo funciona la mente y el cuerpo de un adolescente y cómo has de gestionar sus altibajos de humor, cansancio o euforia?
Nuestro hijo ha descubierto que es un individuo singular dentro de la sociedad, ya no está en una burbuja viéndolo todo desde dentro, sino que está empezando a asomar la cabeza y a participar de los acontecimientos que surgen a su alrededor, es consciente de que sus actos o palabras causan efectos.
Nuestro hijo es cada vez más consciente de que forma parte de ese escenario y nosotros poco a poco vamos dejando de ser el centro de su universo. Ahora en su universo hay más cosas, cosas que descubre que son también importantes para él: los amigos, chicas o chicos, grupos, etc. Las relaciones sociales se vuelven importantes.
Para que todo este amalgama vaya poniéndose ordenadamente en su sitio hay varias cosas, que como padres podemos hacer, a pesar de que a veces parece que ya nos han destronado!!
En este post te hablaré de su felicidad, la balanza perfecta para una buena adolescencia.
Los sentimientos positivos en la adolescencia son fundamentales ya que debido a sus cambios físicos y hormonales, el adolescente puede tener altibajos que le afecten a sus estabilidad emocional.
Que a nuestro hijo adolescente le guste escuchar la música a todas horas, que disfrute comiendo o bailando, que realice un deporte que le divierta con amigos…, son acciones que hacen que segregue esta hormona “de la felicidad”, las endorfinas.
Siempre es bueno el deporte, en todas las edades, cada una por motivos diferentes. Pero en la adolescencia es fundamental para el buen equilibrio mental.
Durante el deporte se segregan endorfinas, hormonas que afectan al bienestar y proporcionan esa sensación de felicidad. Por este motivo el adolescente, además de para su buen desarrollo corporal/físico, ha de realizar actividades físicas.
Algunos consejos para que tu adolescente sea feliz y tu también:
1) Respeta su cansancio, no es apatía, es cansancio real fruto de su desarrollo mental y físico. Si le dejas descansar verás que luego está más contento y receptivo.
2) Disfruta de lo que le hace disfrutar, comparte sus emociones.
3) Si tienes 3 adolescentes quizás los 3 escuchen música diferente, y cada cuarto sea una pequeña discoteca. Vívelo como algo sano y natural, la música les hace sentir bien y eso es importante.
4) Hazles de vez en cuando comidas que les encanten, verás como te lo agradecen.
5) Comparte con ellos 1 comida al día como mínimo, vive su adolescencia al máximo. Te será mucho más llevadera.
6) La adolescencia es la etapa donde han de empezar a manejar con responsabilidad su etapas de libertad. Por lo tanto ve soltando cuerda poco a poco. Eso no significa que no hayan normas, al contrario. Han de tenerlas y él/ella tienen que respetarlas.
7) Su grupo de amigos ahora es lo más importante. Con quién va, cómo son, que hacen… Debes averiguarlo. Lo ratos de descanso (la sobremesa por ejemplo es un buen momento) habla sobre sus amigos con él/ella.
8) No se ha de despistar el tema estudios. Puede que en estas etapas baje su rendimiento escolar. No aflojes en este aspecto. Has de estar con mil ojos, pues a pesar de su cansancio y todo lo que le rodea son años en los que sus calificaciones cada vez son más importantes para su futuro. Si es necesario échale una mano con un refuerzo puntual en la asignatura que más le cuesta.
9) Por último haz un poco de memoria de tu adolescencia y ten empatía con tu adolescente.
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¡Ánimo con tu adolescente!
Mira este video interesante, te ayudará a entender este post: